La sobrepoblación de animales de compañía y el abandono son la principal causa de la saturación de los refugios y de la desgracia de millares de perros y gatos al año. Pero si tomamos conciencia podemos manejarlo, con tres sencillos pasos: ADOPTAR, CUIDAR, ESTERILIZAR.
Muchas personas comparten su vida con perros, gatos y otros animales, que nos acompañan y hacen gozar con sus mimos y juegos. Es maravilloso poder compartir la vida con estos animales, que han llegado a ser dependientes del ser humano, tras miles de años de haber sido domesticados por el hombre. Eso mismo nos impone una tremenda responsabilidad por los animales que nos acompañan, porque depende de nosotros su bienestar y felicidad. AMAR les presenta tres grandes pasos para demostrarle a tu animal que lo amas:
ADOPTA: Millares de perros y gatos esperan en perreras y refugios, la dignidad de un hogar donde ser querido. La gran mayoría de estos animales tuvieron la mala fortuna de ser "regalos" en navidad, para un cumpleaños o un "capricho" al paso por la tienda de animales. Tuvieron la mala fortuna que, al crecer o hacer travesuras, ya no los quisieron más en ese hogar. Fueron a dar a la calle, a un descampado, sufriendo hambre o enfermedades... Ahora esperan una nueva oportunidad, que bien merecen, a manos de personas sensibles y responsables que los cuiden.
CUIDA: Ser responsable es hacerse cargo completamente de las necesidades físicas y psíquicas de tu animal: alimentación balanceada para su especie, agua fresca, un espacio donde dormir, seco y bien protegido del frío; espacio para moverse, un paseo diario, juegos o compañía para entretenerse, y muy importante su educación. Tu compañía, es imprescindible de la que él disfruta mucho. Si por trabajo o estudios no puedes cuidarlo por unos días: déjalo con alguien de confianza, que sepa de animales de su especie; o búscale una guardería recomendada por su buen trato. Cuídalo como se merece un ser vivo que siente igual que tú, nunca lo abandones.
ESTERILIZA: Es la única manera efectiva de controlar la sobrepoblación de perros, gatos y otros mamíferos. Con una simple operación rutinaria, tu animalito (macho o hembra) dejará de tener celo, cesará el marcaje territorial (orinar en ciertos lugares del patio o la casa) y se podrá desarrollar con toda normalidad. No es cierto que las hembras tengan que parir obligatoriamente al menos una camada antes de ser castradas; y lo que sí es cierto es el drama al que están obligados a vivir los animales en refugios atestados de “animales que sobran”. Esterilizar a tu animalito es hacerte responsable no sólo por su salud sexual, sino también por un problema público de sobrepoblación y abandono: pues si bien puedes tratar de buscarle hogar a los cachorros que tenga tu perra o gata, nunca podrás estar 100% seguro de que el cachorro llegará a un buen hogar, donde lo cuidarán hasta el fin de sus días.
¡DEMUESTRA EL AMOR QUE SIENTES POR TU MASCOTA!